“Que se lo lleve Marcos Ginocchio”, “Muy irresponsable no haberlo castrado” o “Nunca tendrías que haberlo adoptado”, fueron sólo algunos de los mensajes que recibió.
Así las cosas, lejos de echar un manto de piedad sobre el tema, recientemente Romina Uhrig respondió las furiosas críticas desde el streaming y sus declaraciones causaron más enojo todavía.
“¿Por qué lo voy a castrar? ¡Castrate vos y dejá a mi perro tranquilo!”, disparó molesta después de que Gastón Trezeguet recordase la furia de los internautas. “El perro es chiquito, tiene dos años y no lo voy a castrar. A mi perra sí la castré, fue madre dos veces, pero a Caramelo no lo voy a castrar. Es mi perro y hago lo que se me canta”, argumentó entonces sobre su firme decisión.
Al tiempo que sobre las acusaciones de su descuido al escapársele el perrito, Romina preguntó molesta: “¿Qué les importa a ustedes? ¿A quién no se le escapa un perro? Ay, ellos son tan perfectos”.
En tanto, estas declaraciones no hicieron más que enfurecer aún más a los usuarios que hasta exigieron que le saquen el perro a la ex GH. “Es ignorante y quiere hacerse la picante. La castración existe por algo: los animales viven más, se estresan menos y no sufren. Pero parece que prefiere hacerse la picante en una nota”, fue una de las tantísimas reacciones virtuales.
La tajante reacción de Romina Uhrig al ver su sobrino en el casting de Gran Hermano
Falta muy poco para el comienzo de una nueva edición de Gran Hermano (Telefe) y están realizando las últimas etapas de los casting para definir quiénes serán los próximos en entrar a la competencia y vivir dentro de la casa más famosa del país.
En este contexto, durante la mañana cientos de personas hicieron fila en los estudios de Kuarzo para el casting y el streaming de Republica Z estuvo presente para charlar con aquellos que sueñan con entrar en el reality.
Emma Vich fue quien habló con los aspirantes, y en medio del móvil se encontró con el sobrino de Romina Uhrig, Fabián Herrera, listo para entrar a la casa.
Dado que Romina se encontraba en el piso, esto generó una enorme tensión ya que ambos tuvieron una fuerte interna familiar. “Hola Ro”, deslizó el joven mientras la ex diputada no podía disimular la incomodad.
De todas formas, con algo de frialdad, accedió al hablar con su sobrino y se limitó a desearle suerte con su búsqueda. “Hola, Fabi. Bueno, éxitos”, fueron sus palabras.