Francisco pidió ante los embajadores de Argentina y Chile que el acuerdo que evitó la guerra en 1978 sirva para "un renovado llamamiento a la paz y al diálogo” en la actual situación bélica mundial. Hermético silencio de Casa Rosada y tensión política entre Javier Milei y Gabriel Boric.
El Papa Francisco encabezó una audiencia en el Vaticano para conmemorar el 40° Aniversario del Tratado de Paz y Amistad que en 1978 evitó la guerra entre Argentina y Chile. Fue en medio de la tensión entre los presidentes Javier Milei y Gabriel Boric. Foto: Vaticano.
El Papa Francisco destacó el acuerdo de Paz y Amistad que evitó en 1978 la guerra entre Argentina y Chile por diferencias limítrofes en el Canal de Beagle e islas del Atlántico Sur. Si bien evitó referirse a la tensión que provocó el faltazo del canciller argentino, Gerardo Werthein, en medio de cruces entre los presidentes Javier Milei y Gabriel Boric, el sumo pontífice propuso "replicar las iniciativas de concordia para resolver los conflictos en curso" actualmente en el mundo.
Aunque habían sido invitados los presidentes y los dos cancilleres, Argentina decidió enviar a la audiencia solo a la representación diplomática ante Roma y el Vaticano, luego de que el Canciller de Milei, Gerardo Werthein, explicara en declaraciones periodísticas el fin de semana que no asistiría debido a cruces políticos que mantuvieron con las delegaciones encabezadas por los presidentes Javier Milei y Gabriel Boric la semana pasada en la cumbre del G-20 en Brasil.
Mientras desde la Casa Rosada mantuvieron este lunes un hermético silencio ante la consulta de A24.com, en declaraciones televisivas previas, el Canciller dio su versión de la ausencia: “No voy a ir. Tenemos un profundo respeto por el Papa y con el Vaticano, pero desafortunadamente a veces ocurren hechos dentro de las relaciones bilateral que complican las cosas".
"En el G20 tuvimos algunas circunstancias que aconsejaban que este no es el mejor momento para hacernos presentes personalmente”, expresó el ministro. Sin embargo, argumentó que el país enviaría a su representación diplomática: “La Argentina va a estar con un representante y nuestro embajador en Roma”.
Sin embargo, desde la Casa Rosada evitaron brindar más detalles sobre los supuestos cruces que habrían protagonizado la delegación de Milei y la del presidente chileno en Brasil. Allí otro mandatario, Gustavo Petro, de Colombia, denunció en redes sociales haber mantenido una discusión con el presidente de Argentina, pero cuyos videos habrían sido borrados de las redes sociales.
Sin la presencia del canciller argentino Gerardo Werthein, el papa Francisco habló este lunes en la Sala Regia del Vaticano para celebrar el 40° aniversario del Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile firmado en ese mismo lugar el 29 de noviembre de 1984. El acuerdo, alcanzado gracias a la mediación del papa Juan Pablo II, puso fin a un peligroso conflicto que estaba por iniciarse.
En la Sala Regia, 40 años después, volvieron a estar presentes los diplomáticos de los países acreditados ante la Santa Sede para solemnizar aún más la importancia del aniversario de paz. Pero no estaba el canciller argentino Gerardo Werthein, “por problemas de agenda” y por orden del presidente Javier Milei, empeñado en desairar a los chilenos por un enfrentamiento ideológico con el izquierdista presidente Gabriel Boric en la reunión del Grupo de los 20 en Río de Janeiro hace unos días.
Francisco destacó que “se evitó el conflicto armado que estaba por enfrentar a dos pueblos hermanos y concluyó con una solución digna, razonable y ecuánime”.
“Espero que el espíritu de encuentro y de concordia entre las naciones, en América Latina y en todo el mundo, deseoso de paz, pueda ayudar a multiplicarse en iniciativas y políticas coordinadas para resolver las numerosas crisis sociales y medioambientales que afectan a las poblaciones de todos los continentes, especialmente a los más pobres”, señaló el Papa.
“Este modelo de una completa y definitiva solución de una controversia a través de medios pacíficos, merece ser propuesto a la situación actual del mundo, en el que tantos conflictos perduran y se agravan, al no tener la voluntad efectiva de excluir en forma absoluta el uso de la fuerza o la amenaza para resolverlos”.
El pontífice argentino recordó que el momento más importante del reconocimiento de Argentina y Chile a la Santa Sede se vivió en el Vaticano el 28 de noviembre de 2009, en la conmemoración del 25°. aniversario del Tratado. Las presidentes de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y de Chile, Michelle Bachelet, acudieron en una audiencia única ante el papa Benedicto XVI, Joseph Ratzinger.
Francisco dijo que Argentina y Chile “son dos pueblos hermanos con una vocación común de fraternidad, de respeto y amistad, que es fruto en gran parte de la tradición histórica que está en la base de su historia y de su rico patrimonio cultural y espiritual”, señaló Francisco citando las palabras de su predecesor.
“He querido dar especial relieve a esta conmemoración, también con la presencia de los señores cardenales y del Cuerpo diplomático –que agradezco con el corazón--, tanto para recordar dicho aniversario como para lanzar al mundo, en este momento, un renovado llamamiento a la paz y al diálogo”, agregó.
En el marco del encuentro organizado por el Papa Francisco para recordar la mediación papal entre la Argentina y Chile por el conflicto del Canal de Beagle, el canciller Gerardo Werthein había anticipado su decisión de no asistir debido a “hechos desafortunados” que ocurrieron durante la cumbre del G20 celebrada en Brasil.
Según trascendió, en la Santa Sede se lamentaron por la ausencia de Whertein, aunque nadie quiso explicarlo oficialmente, fuentes cercanas al Papa dijeron que "es lamentable, pero lo importante es que el evento se hace. Peor hubiera sido que no se hiciera… Es un escándalo en términos latinoamericanos, pero hay que tener paciencia”.
Al parecer, la decisión del Canciller de no ir estuvo sujeta a una orden de Milei, que tiene ideas contrapuestas al Chile que preside Boric, pero de acuerdo a la nueva directiva en la política internacional, y el vuelvo que dio a la Cancillería al asumir Werthein, Milei anunció que Argentina dejó su tradicional postura de neutralidad en los conflictos armados y anunció su alineamiento absoluto a las posturas internacionales de Estados Unidos e Israel.
Justamente sobre este último país, el Papa Francisco pidió en audiencias recientes que la comunidad internacional "investigue si hubo un genocidio cometido por Israel contra el pueblo palestino" en momentos en que el presidente