En el último día de sesiones ordinarias del año, Milei define el temario de convocatoria a extraordinarias. Crece la tensión con el PRO y la UCR tras la caída de Ficha Limpia en Diputados. El Gobierno redobla la apuesta e impulsa la eliminación de las PASO.
Javier Milei convocará a sesiones extraordinarias del Congreso para tratar la eliminación de las PASO pero amenaza con no enviar el Presupuesto 2025 por la falta de acuerdos. Foto: Casa Rosada.
El presidente Javier Milei convocará a sesiones extraordinarias para lo que resta de diciembre, según adelantaron fuentes del círculo más cercano al presidente. Aunque terminaban de definir el temario, la prioridad del Gobierno serán los dos proyectos de reforma electoral que incluyen la eliminación de las PASO y la reforma a la ley de financiamiento de Partidos Políticos, que cambia sustancialmente el sistema de representación.
Sin embargo, ante la falta de acuerdo con los aliados del PRO y la UCR, y en medio de la polémica por la caída de la sesión solicitada por el PRO para la ley de Ficha Limpia, el Gobierno analiza no incluir el Presupuesto 2025 y seguir gobernando por decreto con el presupuesto reconducido de 2023.
"Si no hay acuerdo por el Presupuesto que mandó el presidente, no lo vamos a mandar a extraordinarias", confirmó este viernes a A24.com una fuente de Balcarce 50 al tanto de las negociaciones con el PRO.
El jueves fue "un día bisagra" para definir si convocan a sesiones extraordinarias, había anticipado a A24.com una alta fuente cercana a Milei. Pese al avance en las negociaciones abiertas de manera individual con varios gobernadores, en el Gobierno admitieron que hasta ahora no hubo acuerdo con los bloques aliados para que sea tratado en las próximas semanas de diciembre.
En cambio, entre los temas que el gobierno considera prioritarios más allá del presupuesto, es ahora debatir reforma política, específicamente la eliminación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la modificación del financiamiento de los partidos.
La idea del oficialismo es avanzar en la eliminación de las PASO, la modificación de la ley Orgánica de Partidos Políticos y el sistema de financiamiento de las fuerzas que compiten en los comicios, pero admiten que de no conseguir el respaldo, estará cumplido el objetivo del Poder Ejecutivo de instalar el tema y dejar en evidencia a los que se oponen a los cambios contra "los gastos de la política".
También podría sumar el proyecto de privatización de Aerolíneas Argentinas y los pliegos de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para integrar la Corte Suprema, de conseguir los votos necesarios para su aprobación, y con la intención de demostrar que se habilitaron todas las instancias institucionales posibles para el nombramiento por su curso natural.
Y un nuevo proyecto de ley de Ficha Limpia que en medio del escándalo por el faltazo de varios legisladores de La Libertad Avanza y denuncias de un pacto de impunidad con el kirchnerismo el propio presidente Milei le anticipó a la autora del proyecto, Silvia Lospennato, que presentará uno propio y que también podría ser debatido en extraordinarias.
La estrategia de la Casa Rosada es negociar con el PRO que a cambio de votar Ficha Limpia, los aliados le voten el presupuesto a Milei, tal como fue enviado al Congreso, sin aumentos de partidas que reclaman los gobernadores.
Y en las filas de LLA se defendieron de las acusaciones de la oposición, al negar un pacto con el kirchnerismo para hacer caer la sesión en Diputados el jueves, y, por el contrario, responsabilizaron al "PRO por no haber juntado los votos necesarios para su proyecto de Ficha Limpia".
Lo que fue interpretado como un nuevo pase de factura de la Casa Rosada a los gobernadores aliados, por trabarle el Presupuesto a Milei.
En Casa Rosada no ceden a los reclamos de más fondos de los gobernadores. Aunque podría hacer cambios si los gobernadores dicen de dónde se sacaría el dinero y sin resignar el déficit cero. En ese caso, Milei podría cambiar de opinión y convocar nuevamente a extraordinarias para el Presupuesto en febrero.
Cerca de Milei cayó muy mal el comunicado firmado por los gobernadores esta semana en el que reclamaron al presidente 5 puntos entre ellos, la deuda por las cajas previsionales, obras públicas y fondos ATN que según el gobierno, sumarían alrededor de 3700 millones de dólares, que no hay.
"No estamos dispuestos a negociar esos 5 puntos. Si ellos quieren presupuesto, tienen que aprobar el que está”, insistieron en los pasillos de la Casa Rosada, tras el documento de los mandatarios provinciales de Juntos por el Cambio.
Los reclamos consisten en las deudas por cajas previsionales; la coparticipación del impuesto a los combustibles líquidos; la distribución del Fondo de Aportes del Tesoro Nacional (ATN); la limitación de la alícuota de la Agencia de Recaudación Federal (ex AFIP) y compensaciones pendientes del Consenso Fiscal 2017.
Los que llevan las cuentas en la administración libertaria estiman que los pedidos configuran un total 3.700 millones de dólares y advierten que las provincias también tienen que hacer el ajuste como lo hizo la Nación.
Si bien en los últimos días los negociadores del Poder Ejecutivo no descartaban avances con las provincias, en las últimas horas aclararon que las conversaciones están cortadas y que la posibilidad de incluirlo en el temario para diciembre “es muy baja”, por lo que se espera la prórroga del Presupuesto 2023 por segundo año consecutivo.
Una última posibilidad es que en algún momento los gobernadores acepten el presupuesto tal como está y sean convocadas a extraordinarias para febrero", dijo una fuente de Balcarce 50 a A24.com.
