Cuando en febrero se reanuden las audiencias del juicio por el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner, se hará efectivo el reemplazo del abogado de una de las principales acusadas, Brenda Uliarte.
Brenda Uliarte, una de las acusadas, tomó una decisión que podría cambiar la marcha del juicio. ¿Qué pasó con la investigación de los custodios?
Cuando en febrero se reanuden las audiencias del juicio por el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner, se hará efectivo el reemplazo del abogado de una de las principales acusadas, Brenda Uliarte.
El defensor oficial Eduardo Chittaro asumirá en lugar de Alejandro Cipolla, a quien Uliarte despidió a través de una nota que envió desde la cárcel de Ezeiza a Comodoro Py.
La expectativa es que este cambio de fichas permita dar un vuelco en el desarrollo del proceso oral, porque según fuentes judiciales "elevaría la calidad profesional" de las partes que intervienen en esta causa.
En la primera etapa del juicio se registraron una sucesión de situaciones que los mismos magistrados indicaron como improcedentes y en algunos casos como bochornosas, lo que llevó a la presidenta del Tribunal Oral Federal 6, Sabrina Namer, al límite de su paciencia.
Uno de los incidentes más notorios se dio cuando Brenda Uliarte golpeó a Gastón Marano representante legal de Nicolás Carrizo, jefe de la Banda de los Copitos. La consecuencia fue que el TOF 6 le aplicó una advertencia, y ordenó reforzar la seguridad que brinda el Servicio Penitenciario Federal durante las audiencias.
Además, cuando el Tribunal aceptó sumar la imputación por violencia de género contra Fernando Sabag Montiel, el ex abogado de Uliarte sorprendió al solicitar que se llame a declarar a Cristina Kirchner, con el propósito de que confirme si se identifica como mujer, lo que casi le valió una sanción de los jueces.
En Tribunales nadie oculta el deseo de que este juicio transcurra con seriedad, sobre todo al tratarse de la tentativa de magnicidio a la vicepresidenta de la Nación, que a su vez fue titular del Poder Ejecutivo durante dos períodos.
La mujer que junto con Fernando Sabag Montiel llevó adelante el plan para matar a Cristina Kirchner en septiembre de 2022, solicitó el desplazamiento de su abogado Alejandro Cipolla sin precisar razones.
Sin embargo, fue el propio Cipolla quien reveló que Brenda Uliarte lo acusó de trabajar para los servicios de inteligencia de Estados Unidos. Su exdefensor opinó que no comprende sus actos ni está en condiciones de tomar decisiones. Agregó que los primeros exámenes psicológicos del Cuerpo Médico Forense arrojaron que su antigua clienta sufre “trastorno de la personalidad”.
Tras la feria, lo primero que pedirá el defensor oficial Eduardo Chittaro será la intervención de los peritos de la Defensoría General de la Nación para examinar si la imputada está capacitada o no para seguir adelante.
Pasaron seis meses de juicio contra Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo, acusados de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego contra Cristina Fernández de Kirchner. Quedan por delante varios meses para seguir escuchando a los testigos, pasar por los alegatos y finalmente conocer el veredicto.
Como remanente de la causa del atentado contra Cristina Kirchner, hay otro expediente que investiga si los efectivos policiales que debían cuidarla cumplieron con sus deberes de funcionario público o fueron negligentes.
El fiscal Carlos Rívolo y la jueza María Eugenia Capuchetti analizan si la exmandataria se encontraba en estado de indefensión, cuando los policías que la rodeaban no advirtieron que entre los militantes había un agresor armado, que apuntó a su cabeza y gatilló sin que nadie se lo impidiese. De hecho, la detención de Sabag Montiel fue concretada por un grupo de ciudadanos.
Mientras continúa esta pesquisa, los custodios fueron convocados como testigos del ataque en el juicio oral. Entre ellos declaró el histórico jefe del grupo, el comisario inspector Diego Carbone, quien aclaró que no estaba esa noche, aunque admitió que en los días previos se percibía “un clima enrarecido”.
Por otra parte, el departamento de Asuntos Internos de la Policía Federal sobreseyó provisionalmente a los custodios de Cristina Fernández de Kirchner porque quienes estaban a cargo del sumario administrativo entendieron que no hay elementos que determinen que el personal policial incumplió el protocolo.
Los policías beneficiados fueron el comisario Jorge Pellegrino; el subcomisario Guillermo Gallo, el principal Matías Fernández; el subinspector Santiago Guglielmoni, y el sargento Tizeira.
A pesar de haber quedado en el ojo de la tormenta, el Ministerio de Seguridad de la Nación confirmó a Diego Carbone como director del Centro Estratégico de Control Operacional y Custodia de Exmandatarios de la Policía Federal.