Lo que despertó sospechas en la investigación fue que, según la autopsia, Luna no murió como consecuencia de los golpes. Sin embargo, los acusados no le brindaron atención médica durante al menos 14 horas y esperaron hasta la tarde del día siguiente para llamar al 911.
La sospechosa actitud de los detenidos
Fuentes del caso indicaron que mientras Luna agonizaba en el suelo, su padre y hermanos siguieron con su rutina como si nada hubiera ocurrido. Se movían por la vivienda, caminaban junto a la víctima e incluso saltaban su cuerpo para evitar contacto con él.
Cuando finalmente llamaron a emergencias, argumentaron que les parecía extraño que siguiera durmiendo y que, por eso, decidieron alertar a las autoridades.
El fiscal José Luis Suárez, de la UFI N°12 de Lomas de Zamora, ordenó la detención de los tres hombres mientras se realizan más peritajes para determinar la responsabilidad de cada uno en la muerte de Luna. La investigación sigue en curso y se esperan nuevos avances en las próximas horas.