Lo que comenzó como una tarde habitual en familia terminó en una tragedia que enlutó a toda una comunidad en Embarcación, Salta. Un nene de 8 años perdió la vida luego de sufrir un atragantamiento mientras merendaba en la casa de su abuela.
El episodio ocurrió el domingo por la noche, en el barrio Misión Francisqueña. Según informaron medios locales, el menor estaba acompañado por otros niños mientras tomaba té y comía mortadela, sin imaginar que en cuestión de segundos su vida correría peligro.
Lo que comenzó como una tarde habitual en familia terminó en una tragedia que enlutó a toda una comunidad en Embarcación, Salta. Un nene de 8 años perdió la vida luego de sufrir un atragantamiento mientras merendaba en la casa de su abuela.
El episodio ocurrió el domingo por la noche, en el barrio Misión Francisqueña. Según informaron medios locales, el menor estaba acompañado por otros niños mientras tomaba té y comía mortadela, sin imaginar que en cuestión de segundos su vida correría peligro.
Los primeros signos de alarma llegaron cuando el pequeño comenzó a presentar dificultades para respirar y tragar. De inmediato, los adultos intentaron ayudarlo, pero la situación se agravó rápidamente. El niño entró en un cuadro de asfixia severa, y, a pesar de los intentos de su familia por desobstruir sus vías respiratorias, no lograron que reaccionara.
Ante la desesperación, los familiares decidieron trasladarlo de urgencia en moto al hospital más cercano. Sin embargo, al llegar, los médicos confirmaron la peor noticia: el niño ya no tenía signos vitales.
El padre del niño, César Alberto Vicente, un pastor reconocido en la comunidad, expresó su dolor y desconcierto por lo ocurrido. En declaraciones a UVC Canal 10, relató con angustia los últimos momentos de su hijo.
“Yo le había dado un pancito con un poquito de fiambre para que se lo llevara a la casa de su abuela. Me sorprendí con esta noticia de mi hijo”, contó, visiblemente afectado.
Además, detalló cómo su familia intentó salvarlo en los minutos críticos:
“Mi hermana me ha ayudado a buscar una moto y después se fue con mi cuñada rápidamente al hospital. Cuando llego allá, mi hijo ya estaba sin vida”, lamentó.
La muerte del pequeño generó un profundo impacto en la comunidad, y las autoridades locales están investigando el caso. Aunque todo indica que se trató de un accidente doméstico, la tragedia reabre el debate sobre la importancia de conocer maniobras de primeros auxilios, especialmente en casos de atragantamiento.
En situaciones como esta, los especialistas recomiendan actuar rápidamente aplicando la maniobra de Heimlich, un procedimiento que puede salvar vidas en segundos. Saber cómo actuar ante un atragantamiento puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
