A casi cinco meses de la desaparición de Loan Danilo Peña en la zona rural de 9 de Julio, en Corrientes, la investigación avanza con nuevas pericias y el análisis de pruebas bajo la supervisión de la jueza Pozzer Penzo.
"Loan volvió solo a la casa", conmoción por la revelación más inquietante y esperada
A casi cinco meses de la desaparición de Loan Danilo Peña en la zona rural de 9 de Julio, en Corrientes, la investigación avanza con nuevas pericias y el análisis de pruebas bajo la supervisión de la jueza Pozzer Penzo. Este caso, que ha mantenido en vilo a la comunidad y a las autoridades, suma ahora un pedido de sobreseimiento que incluye una teoría escalofriante sobre lo que pudo haber ocurrido.
En las últimas horas, los abogados Jorge Montti y Marcelo Hanson, representantes legales de los detenidos Daniel “Fierrito” Ramírez y Mónica Millapi, presentaron un extenso documento de 21 páginas ante la Justicia. En este escrito, exponen detalladamente las pruebas recopiladas y solicitan el sobreseimiento total y la libertad de sus defendidos.
El documento, al que tuvo acceso El Destape, incluye un análisis minucioso de cada movimiento de los involucrados el día en que Loan desapareció. Los abogados describen cómo tanto Ramírez como Millapi asistieron a un almuerzo en la casa de Catalina Peña, abuela de Loan, y detallan los eventos posteriores, que culminaron en la desaparición del niño.
El relato de los hechos señala al naranjal cercano a la casa de la abuela como un punto central. Allí, los implicados habían acudido para recoger fruta. Según el documento, Mónica Millapi y Daniel Ramírez se apartaron del grupo momentáneamente para atender una llamada telefónica. Este detalle se ha vuelto clave para reconstruir la línea temporal de los hechos y determinar qué pudo haber sucedido durante ese intervalo.
El matrimonio insiste en su versión de los hechos, respaldada por declaraciones y evidencias presentadas en la causa. En el escrito, se menciona de manera contundente: “A esta altura debemos afirmar que, probado está que Loan conforme surge de las probanzas rendidas en autos regresó antes y en solitario hacia la casa de su abuela”.
El análisis de la defensa sugiere que fue en ese momento cuando Loan pudo haber desaparecido, planteando la posibilidad de que su desaparición se deba a la acción de terceros o a circunstancias desconocidas que escaparon a la percepción de Ramírez y Millapi. Ambos aseguran que su último recuerdo de Loan fue viéndolo en la zona del naranjal, junto a su tío, Benítez.
Los abogados de Ramírez y Millapi argumentan que las pruebas presentadas hasta ahora no vinculan a sus clientes con la desaparición del niño de forma concluyente. En su presentación, Montti y Hanson exponen los testimonios y las pruebas periciales que respaldan su hipótesis y aseguran que hay inconsistencias en el relato oficial que no han sido suficientemente exploradas.
Por ejemplo, en el documento se destaca que Loan, al haber regresado solo a la casa de su abuela, pudo haber estado expuesto a riesgos desconocidos. “No hay elementos que determinen una acción directa de nuestros defendidos en la desaparición del niño”, señala uno de los fragmentos del escrito.
Este pedido de sobreseimiento representa un punto de inflexión en la causa. Si bien la jueza Pozzer Penzo continúa evaluando las pruebas, la teoría presentada por la defensa obliga a los investigadores a reconsiderar los hechos y posibles culpables. La implicación de terceros aún sin identificar o la posibilidad de un accidente fortuito parecen ganar peso en la argumentación de los abogados.
Hasta ahora, la investigación había girado en torno a las declaraciones de los familiares y los últimos movimientos registrados de Loan, pero este nuevo enfoque obliga a un análisis más amplio de los elementos presentes en la escena y del entorno familiar.
El expediente cuenta con declaraciones de testigos y análisis periciales que serán decisivos para el futuro del caso. Entre las pruebas destacadas se encuentra el testimonio del tío Benítez, quien fue la última persona en ver a Loan en el naranjal, según los abogados defensores. La investigación se centra en determinar si existe alguna omisión en los testimonios que pueda arrojar más luz sobre el paradero del niño.
El caso ha generado un fuerte impacto en la comunidad de 9 de Julio, donde la desaparición de un menor ha removido sentimientos de preocupación y exigencia de justicia. Las autoridades locales, por su parte, han enfrentado críticas por la lentitud en la resolución de la investigación, lo que ha aumentado la presión sobre el equipo de investigación liderado por Pozzer Penzo.
Con el reciente pedido de sobreseimiento, las expectativas de una resolución parecen más distantes y el futuro del caso, incierto. Sin embargo, la jueza ha reiterado su compromiso con una instrucción exhaustiva que contemple todas las aristas posibles.
A medida que avanzan las investigaciones, es evidente que la desaparición de Loan Peña sigue rodeada de misterios y teorías contrapuestas. La teoría presentada por los abogados de Ramírez y Millapi se suma al entramado de versiones y pruebas que deben ser analizadas con cuidado. Mientras tanto, el dolor y la incertidumbre de la familia y la comunidad persisten, esperando respuestas que traigan claridad y justicia.
La investigación debe seguir su curso, incluyendo un análisis integral de todas las pruebas y nuevas pericias que puedan arrojar luz sobre los hechos de aquel fatídico día en la zona rural de Corrientes.
