Asimismo, afirmó: "Está la versión muy firme de que podrían haber visto algún distribuidor ahí de narcomenudeo, o sea, es decir, en el transcurso de la caminata vieron algo que no tenían que ver y los abordaron".
"Yo no creo que nadie venga después de robar a incendiar un campo para eliminar la prueba, los mata y se da la fuga. No se va a quedar en el lugar incendiando. Por eso, yo digo, a mí hasta el momento hay muchos comentarios policiales que no me cierran", añadió Diéguez.
En ese sentido, completó: "Lo que la mamá me refiere, porque yo estoy teniendo el trato con la mamá, el papá está con un problema muy grave de salud, estuvo hasta hace muy poquito en silla de ruedas porque sufrió un accidente laboral y está mal de salud el papá, es que habitualmente hacían ese camino, pero antes no llegaban hasta ahí".
Y finalizó: "Ahora cuando tenga el acceso directo a todo el expediente, bueno, ahí voy a hacer una teoría del caso conforme los elementos que estén incorporados en las actuaciones y después tendré yo también mi propia conclusión"
"Se habla también del auto rojo con tres ocupantes. Es una versión que la tienen las personas particulares, no la Justicia. En principio la tuvo esa versión la policía, pero supuestamente ellos la habrían descartado de pleno", cerró Carlos.
Los detalles de la autopsia de los dos adolescentes muertos en Florencio Varela
La autopsia de los dos adolescentes encontrados muertos en un descampado de Florencio Varela muestra que en ambos cuerpos había signos de fractura de cráneo, lo que descartaría la hipótesis de que alguno de ellos se hubiera suicidado, señalaron fuentes policiales.
Según el informe forense, en el caso de Paloma Gallardo de 16 años, la causa de la muerte es "lesión cerebral", con "fractura de cráneo" y "traumatismo encefalocraneal grave", según trascendió de fuentes judiciales.
Por su parte en el caso de Josué Salvatierra, de 14 años, el informe señala como causa de la muerte "hemorragia cerebral", con "fractura de cráneo" y "traumatismo encefalocraneal grave".
Ambos jóvenes eran compañeros de la escuela secundaria número 63 de la zona, y fueron encontrados sin vida debajo de un puente, cerca de la fábrica de baterías Champion, en las inmediaciones de la plaza de la localidad de Bosques.