Fueron los vecinos del barrio cerrado quienes se comunicaron con las autoridades tras escuchar varias detonaciones y gritos de la mujer que salió ensangrentada de su casa, que ubicada en el lote K20 del espacio. La Policía se hizo presente tras el alerta, y al llegar a la casa se toparon con la horrorosa escena.
Al llegar, los policías encontraron en el comedor de la planta baja de la vivienda el cuerpo de Ramiro Damián Rotelo con una herida de arma de fuego en el pecho.
Tras ello, hallaron al adolescente, señalado como el autor del homicidio, en la plata superior con un balazo en la cabeza: estaba en uno de los baños.
También estuvo allí el fiscal Christian Granados, de la Unidad Funcional de Instrucción N°2 de ese partido del sur bonaerense, pero al confirmarse que fue el adolescente el que disparó, la causa pasó al Fuero de Responsabilidad Juvenil del departamento judicial de Quilmes.
Una de las hipótesis es que el hecho podría haber sido originado por un brote psicótico ya que, según indicaron los vecinos, el chico podría tener problemas psiquiátricos.