La víctima fatal fue identificada como la sargento Soledad Villalonga Freya, quien se desempeñaba en la Subcoordinación de Zona de Seguridad Rural Lincoln. La oficial conducía el vehículo de menor porte, y falleció en el acto producto de la violencia del impacto.
El conductor del camión, Ricardo Bedolla, de 70 años y oriundo de Junín, sufrió lesiones leves y fue asistido en el lugar por personal médico. Su estado de salud no reviste gravedad, y permanece a disposición de la Justicia para colaborar con la investigación del hecho.
Tras el accidente, la Ruta Provincial 65 debió ser cerrada por completo. La magnitud del siniestro y la necesidad de realizar pericias minuciosas obligaron a desviar el tránsito durante varias horas. Recién pasado el mediodía comenzaron las tareas de limpieza y despeje, pero el impacto generado por la tragedia ya era irreparable.
Las autoridades judiciales y policiales trabajaron de inmediato en el lugar del hecho, levantando testimonios y recolectando evidencia para tratar de reconstruir la secuencia exacta del accidente. No se descarta ninguna hipótesis, aunque los primeros indicios apuntan a una posible invasión de carril.
La muerte de la sargento Villalonga Freya generó profundo pesar entre sus compañeros de la fuerza y en toda la comunidad de seguridad rural. Su rol en la Subcoordinación de Lincoln era activo y reconocido, y su pérdida deja un vacío tanto a nivel institucional como humano.
Desde su sector de trabajo emitieron un breve comunicado lamentando la pérdida y destacando su compromiso profesional. "Nos cuesta creer esta noticia. Era una compañera valiosa, dedicada y muy querida", expresó un colega de la oficial.
El tramo comprendido entre Los Toldos y General Viamonte, sobre la Ruta 65, ha sido escenario de múltiples siniestros viales en los últimos años. La falta de señalización en ciertos sectores, el tránsito de maquinaria agrícola y la alta velocidad son factores señalados frecuentemente por los vecinos como posibles causas de riesgo.
“Hay momentos del día en que el sol te encandila de frente, y con la ruta tan angosta, no hay mucho margen de maniobra”, comentó un habitante de la zona. Estas condiciones, combinadas con distracciones o maniobras indebidas, podrían haber influido también en esta ocasión.
El caso quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción N.º 8 de Junín, que ya tomó declaraciones y solicitó las primeras medidas periciales. Se espera el informe definitivo de la Policía Científica para establecer si alguno de los vehículos invadió el carril contrario o si hubo algún desperfecto mecánico.
El fiscal a cargo indicó que en las próximas horas se tomarán nuevas declaraciones y se analizarán las cámaras de seguridad de la zona, si las hubiera. También se realizará una autopsia para confirmar los detalles médicos del fallecimiento, aunque todo indica que el golpe fue determinante.
Tras la tragedia, varios vecinos de Baigorrita se acercaron al lugar del siniestro para colaborar en lo posible. Algunos asistieron en los primeros minutos antes de la llegada de los equipos de emergencia, mientras que otros ayudaron en la coordinación del tránsito para evitar nuevos accidentes durante las maniobras de rescate.
El tránsito sobre la Ruta 65 fue restablecido por completo cerca de las 15 horas, pero la imagen del choque quedó grabada en la memoria de quienes pasaron por allí esa mañana.
Al confirmarse el fallecimiento de la sargento, la Policía de la Provincia de Buenos Aires dispuso el izamiento de banderas a media asta en varias dependencias. También se inició un protocolo interno de homenaje para acompañar a la familia y rendirle tributo a una agente que murió en cumplimiento de sus funciones.
Desde el Ministerio de Seguridad provincial no se emitió aún una declaración oficial, aunque se espera que en las próximas horas se publique una nota formal en sus canales institucionales.