"Laudelina sabía que el matrimonio de Caillava tenía a Loan y reclamaba a qué hora lo iban a devolver", detalló el penalista, en relación con los momentos posteriores a que el niño se perdiera.
Según el letrado, este mensaje es la confirmación de que Loan estaba retenido en algún sitio cercano y que el plan original era devolverlo en cuestión de horas. Sin embargo, algo cambió abruptamente y Carlos Pérez, pareja de Caillava, regresó sin el niño.
Gallego aseguró que el caso responde a un secuestro extorsivo fallido: “Era un plan de secuestro exprés que salió mal”. La intención, según explicó, era pedir dinero a cambio del niño, pero en algún punto de la operación, el curso de los acontecimientos se desvió y la desaparición de Loan se convirtió en un misterio sin resolver que mantiene en vilo al país.
Caso Loan: le rechazaron la excarcelación a El Americano
Por otro lado, Nicolás Gabriel Soria, más conocido como “El Americano”, permanecerá detenido por un largo tiempo. Esta semana, la Cámara Federal de Casación Penal rechazó su pedido de excarcelación, lo que deja claro que su situación procesal se alargará hasta que el caso de la desaparición de Loan se ventile en un juicio oral.
Con 43 años, Soria está sospechado de haber influenciado en testimonios clave y de haber intentado desviar la investigación hacia una pista falsa relacionada con el narcotráfico, un giro que complicó aún más un caso ya cargado de misterio.
El hombre se presentó como miembro de varias instituciones internacionales de renombre: la CIA, la DEA, Interpol y una ONG dedicada a la lucha contra la trata de personas. Sin embargo, no se pudo verificar la veracidad de sus credenciales, lo que lo convierte en una figura aún más enigmática.
En los días posteriores a la desaparición de Loan, "El Americano" se vinculó rápidamente con algunas de las personas cercanas al niño, como Camila Núñez, Laudelina Peña -la tía del niño- y su hija Macarena.
Según las investigaciones, Soria también influyó de manera decisiva en los testimonios de algunos de los menores que habían participado de la excursión a la tapera en busca de naranjas, un grupo que podría haber tenido información relevante sobre los eventos de aquel día.
La Justicia sostiene que el falso agente impidió que estos niños declararan espontáneamente ante los investigadores, lo que agravó aún más la ya delicada situación del caso.