Al igual que en el 2001, Racing copó dos estadios en el mismo día: La Nueva Olla en Asunción y el Cilindro de Avellaneda.
Racing sueña y alienta a lo grande. En la final de la Copa Sudamericana ante Cruzeiro, la Academia se puso por 3-1 en el estadio La Nueva Olla de Asunción y se consagró campeón, un logro que no solo se vivió en Paraguay, sino también en Avellaneda. Mientras cerca de 20 mil hinchas alentaron desde el estadio paraguayo, otros 40 mil se trasladaron hasta Asunción sin entradas y miles más se reunieron en el Cilindro para vivir esta histórica jornada.
La situación recuerda inevitablemente a diciembre de 2001, cuando los fanáticos académicos desbordaron el José Amalfitani para presenciar el empate ante Vélez que les dio el Apertura, mientras otro grupo masivo vivía la hazaña desde el Presidente Perón. Hoy, más de dos décadas después, los hinchas repiten la gesta: las 12 mil entradas para el sector de Racing en La Nueva Olla se agotaron en cuestión de minutos, y la presencia masiva de académicos en el estadio y en la ciudad paraguaya confirma su pasión sin límites.
En Avellaneda, el Cilindro fue el epicentro de la fiesta para quienes no pudieron viajar. Con tres pantallas gigantes instaladas en el campo de juego, los socios agotaron el canje de entradas para disfrutar del encuentro desde las tribunas. Además, la jornada incluyó shows musicales de artistas identificados con el club, como Abel Pintos. Esta celebración en casa casi se frustra, ya que el estadio había sido clausurado temporalmente por Aprevide tras los incidentes en la semifinal contra Corinthians, pero la medida fue levantada a tiempo.