El joven piloto argentino de 21 años, que ya forma parte del programa de desarrollo de Alpine y que viene de cerrar la última temporada compitiendo para Williams, no había sido convocado para los GP de Japón, Bahréin ni Arabia Saudita. Sin embargo, su inclusión en el viaje a Miami lo vuelve a poner en el centro de la escena.
Las razones del desgaste con Doohan son claras. Es uno de los cuatro pilotos que todavía no sumó puntos en lo que va del campeonato —junto con Liam Lawson, Gabriel Bortoleto y Fernando Alonso— y Alpine apenas acumula seis unidades, todas aportadas por Pierre Gasly en Bahréin. Además, según trascendidos, la escudería habría invertido cerca de un millón y medio de dólares en reparaciones del coche de Doohan en apenas cinco carreras.
Ese combo de malos resultados deportivos y costos operativos elevados empuja a Alpine a evaluar un recambio. Y el principal candidato a ocupar ese lugar es Colapinto, que con su talento y regularidad sigue consolidándose como la gran promesa argentina en la máxima categoría del automovilismo mundial.
La próxima carrera podría ser determinante. El Gran Premio de Miami no solo ofrecerá otro examen clave para Doohan, sino que podría marcar el inicio del camino de Colapinto hacia su gran oportunidad en la Fórmula 1.